El regreso a la “nueva normalidad” en México será por etapas y se usará un semáforo de cuatro colores, rojo, naranja, amarillo y verde, para medir el grado de restricciones, desde la máxima hasta la mínima, que significa el retorno a todas las actividades.
Andrés Manuel López Obrador.
Gobierno de México
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El plan implica tres etapas: la primera finaliza el 18 de mayo, la segunda abarca desde el 18 al 31 de mayo (implica la elaboración de los protocolos, capacitación, readecuación de espacios y filtros de ingreso en empresas); y una tercera etapa, desde el 1° de junio, en la que se establecerá el funcionamiento del semáforo regional para la reapertura de actividades sociales, educativas y económicas.
El semáforo rojo solo permitirá el regreso de las actividades esenciales (entre las que se definieron minería, construcción y fabricación de transporte). El color naranja permitirá una relativa apertura a las actividades no esenciales. El semáforo amarillo implica una flexibilización apenas mayor que el naranja, con restricciones en espacios abiertos y cerrados (se entiende que es aquí donde podrán a empezar a ver su posibilidad el sector hotelero y gastronómico, aunque no se puntualizó de manera oficial), mientras que el semáforo en verde posibilitará realizar actividades en espacios públicos y la reanudación de las clases.
CONDICIONES QUE DEBERÁN CUMPLIR LAS EMPRESAS.
La secretaria de Economía, Graciela Márquez, afirmó que para la segunda etapa se elaborarán protocolos sanitarios por empresa para el reinicio seguro de actividades, capacitación de personal para seguridad en el ambiente laboral, readecuación de espacios y procesos productivos, filtros de ingreso, sanitización e higiene del espacio laboral.
EL TURISMO Y LA NUEVA NORMALIDAD.
Si bien no hubo un apartado específico para la situación de las empresas de turismo, actividad que está entre las tres primeras en importancia por generación de divisas, Luisa María Alcalde Luján, secretaria del Trabajo y Previsión Social, anticipó: “Estamos por presentar el protocolo para todas las áreas turísticas, es decir cómo y de qué manera podrán reiniciar sus actividades una vez que se encuentren en el color indicado”.
Por su parte, Carlos Joaquín González, gobernador de Quintana Roo, afirmó: “Tenemos claro que requerimos un retorno gradual y con mucho cuidado, pero también es muy necesario volver a la actividad, ya que hemos perdido más de 80 mil empleos en el estado, que representan casi el 22% del total; y esto a pesar de haber implementado un plan consensuado con el sector empresarial para poder mantener la mayor cantidad de los puestos de trabajo”.
Asimismo, el gobernador de Quintana Roo hizo un balance de la situación que se generó desde el 10 de marzo: “Al día de hoy llegamos a casi ocho millones de asientos de avión cancelados y esto evidentemente nos obliga a pensar en una reapertura, que si bien tiene que ser gradual y cuidada debe ser lo más pronto posible”.
MIGUEL TORRUCO LIDERARÁ UN GRUPO DE TRABAJO PARA LA REACTIVACIÓN.
Las secretarias y los secretarios de Turismo aceptaron la propuesta del gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, de conformar un grupo de trabajo especial para tratar temas de reactivación turística y empleo en el sector, mismo que será encabezado por el secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués.
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