Turismo LGBT: segmento crucial para la industria mexicana

Samuel Maldonado, director de Desarrollo de Negocios de Queer Destinations en México, apuntó que “el turismo LGBTQ+ ha experimentado un crecimiento significativo tanto en México como a nivel global, convirtiéndose en un segmento crucial de la industria turística. Según la ONU Turismo, tiene un crecimiento anual del 10.3%, en comparación con el 3.8% del turismo convencional”.

Respecto a la aportación de este segmento al turismo en México, el directivo mencionó: “Para responder a esta pregunta es importante considerar que se estima que el 10% de la población mundial se identifica como parte de la comunidad LGBTQ+.

“Sin embargo, este porcentaje aumenta al 21% entre la Generación Z y generaciones posteriores. Asimismo, LGBT Capital calcula que el poder adquisitivo global de la comunidad asciende a US$ 4.7 billones anuales.”

La aportación en México

De acuerdo con Maldonado, en México el turismo LGBTQ+ representa una derrama económica significativa.

“Según la Secretaría de Turismo este segmento aporta alrededor del 10% del total de ingresos turísticos del país. Además, es importante destacar que el mercado LGBTQ+ se caracteriza por tener un mayor gasto y mayor estancia promedio en comparación con otros segmentos turísticos, lo que incrementa el volumen de ventas en destinos y servicios turísticos y en muchos casos logra desestacionalizarlos”, afirmó.

En la misma línea, Andrés Mejía, director de Leemba Travel, división especializada para el segmento LGBTQ+ de Mexitours DMC, señaló que, de acuerdo con el Fideicomiso de Promoción Turística de Puerto Vallarta, aproximadamente el 40% del turismo que llega al destino forma parte de la comunidad. “Ese es el potencial que tiene este segmento”, subrayó.

En tanto, Raymundo Flores, presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes de la Ciudad de México (AMAV CDMX), dijo que la agrupación encuentra en este nicho una oportunidad de negocio, concretamente para la celebración del “Pride” en la capital del país, que este año reunió a cerca de medio millón de personas de todo el territorio nacional.

“Es un nicho que deja muchos recursos a los destinos a los que llega. Los receptivos nos hemos dado a la tarea de armar paquetes turísticos para garantizar la seguridad de los visitantes.

“Ciudad de México es el segundo destino de Latinoamérica donde más gente asiste a esta celebración después de Río de Janeiro, por lo que lo vemos con un buen potencial de negocio”, apuntó.

¿Qué busca el segmento LGBTQ+?

Sobre las preferencias de la comunidad LGBTQ+ a la hora de viajar, el directivo de Queer Destinations aclaró: “Los turistas LGBTQ+ suelen buscar experiencias locales auténticas, interacciones culturales y actividades que se alejen del turismo masivo.

“Además, prefieren empresas y establecimientos libres de discriminación para evitar situaciones incómodas como comentarios inapropiados, miradas o malos tratos.

“Esta problemática es aún más notable para personas LGBTQ+ no normativas, familias homoparentales y personas trans, quienes enfrentan mayores niveles de discriminación y dificultades durante sus viajes”, advirtió.

Avances de la industria

Para Maldonado cada vez más empresas turísticas están implementando programas de capacitación para asegurar un trato inclusivo y respetuoso hacia la comunidad LGBTQ+.

“Como Queer Destinations, nuestro objetivo ha sido crear entornos respetuosos y seguros en hoteles, medios de transporte, actividades de ocio y restauración, asegurando que ninguna persona LGBTQ+ tenga que ocultar su identidad durante sus viajes.”

“Para ello hemos desarrollado el distintivo Queer Destinations Committed, que otorgamos solo a destinos o empresas que hayan formado al 100% de sus empleados a través de nuestro programa Hospitality Meets Diversity. Este programa capacita a todos los colaboradores, desde directivos hasta personal de atención al público, para comprender mejor las realidades LGBTQ+, prevenir la discriminación y crear espacios inclusivos”, detalló.

Por su parte, Adolfo Díaz de León, líder de los Proyectos de Equidad, Diversidad e Inclusión de Minor Hotels para la región Américas, aseveró: “Nosotros nos enfocamos en el trato. Queremos que siempre haya un espacio seguro también para los colaboradores. El público tiene que ver que somos inclusivos no solo para los clientes, sino también para nuestro equipo”.

En ese orden de ideas, Mejía afirmó que Leemba Travel busca “generar ese espacio de seguridad y que los pasajeros sepan que estarán respaldados y cuidados en todo momento por nuestros guías y operadores”.

Asimismo, recalcó la importancia de que la inclusión sea un valor al interior de las compañías: “Se debe generar ese espacio seguro dentro de tu empresa, o sea que tus empleados, que tu gente se sienta segura. Porque he conocido dueños que son homofóbicos, pero como el turismo LGBTQ+ les deja ingresos, bienvenido sea. Todo empieza desde dentro”.

Retos por superar

A pesar de los avances aún persisten problemas de seguridad y discriminación en algunos destinos y empresas, lo que puede disuadir a los turistas LGBTQ+.

“Es crucial continuar con la educación y sensibilización tanto a nivel gubernamental como privado para mejorar la experiencia turística de la comunidad LGBTQ+. La implementación de programas de capacitación y la creación de servicios especializados son pasos esenciales para fomentar un ambiente inclusivo y seguro”, remarcó el directivo de Queer Destinations.

Mejía, en tanto, consideró que “el reto más importante es el miedo y la inseguridad porque llega junio y muchas empresas ponen sus arcoíris y sus banderitas, pero se acaba junio y no vuelven a publicar nada referido a la comunidad.

“La comunicación tiene que estar presente todo el tiempo, aunque no estoy diciendo que todas las publicaciones deben estarr enfocadas a la comunidad. Las empresas creen que por publicar un video de una pareja LGBTQ+ van a perder clientes.”

Y añadió: “El reto más grande es el tema de la seguridad. Somos una comunidad que ha sido discriminada y atacada. Queremos capacitar a los proveedores turísticos, desde un restaurante pequeño hasta los hoteles más grandes”.