Para disfrutar del verano en familia, Costa Rica es un destino ideal, ya que combina la biodiversidad de la selva tropical con la serenidad de sus playas, brindando así una experiencia auténtica y fuera de lo común que dejará recuerdos imborrables en niños y adultos.
En ese sentido, las autoridades turísticas del país proponen un recorrido de siete días para conocer los principales atractivos del territorio.
Un circuito para vivir Costa Rica en 7 días
El circuito propuesto es el siguiente:
- Día 1-2: San José y Valle Central: la aventura comienza en la ciudad capital, San José, donde el visitante puede explorar el encanto colonial de su centro histórico y visitar el Mercado Central para probar delicias locales.
Desde allí se puede continuar hacia el Valle Central y conocer el pueblo de Sarchí, famoso por sus coloridas carretas pintadas a mano; y el Jardín Lankester, un paraíso de orquídeas.
- Día 3-4: Tortuguero: la idea es dirigirse hacia el Caribe norte y adentrarse en el Parque Nacional Tortuguero, ideal para el ecoturismo y hogar de una impresionante variedad de vida silvestre, incluso tortugas marinas en peligro de extinción.
Aquí está la opción de realizar un atractivo recorrido en bote por los canales naturales para maravillarse con la exuberante vegetación y la gran cantidad de aves tropicales. - Día 5-6: Turrialba: el itinerario continúa en la región montañosa de Turrialba, donde se pueden realizar actividades como rafting en el río Pacuare y visitar la Reserva Biológica Catie, un centro de investigación agrícola con hermosos jardines botánicos.
También existe la opción de relajarse en las aguas termales de Orosi y disfrutar de las vistas panorámicas del Valle Central.
- Día 7: Uvita y Bahía Ballena: el viaje finaliza en la costa del Pacífico Sur, en el encantador pueblo de Uvita, para asombrarse con la impresionante formación de la Cola de Ballena en Bahía Ballena.
Además, allí hay tranquilas playas de arena blanca y los más aventureros tienen la oportunidad de hacer una caminata por el Parque Nacional Marino Ballena, donde es posible avistar ballenas jorobadas, especialmente en septiembre; y delfines, en mayo.
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